Intenperie
2016

Cuando aprendemos otro idioma, se nos abre un nuevo mundo. Nuevas formas lingüísticas se construyen en nuestra mente y así las representaciones de los conceptos comienzan a reconfigurarse. Ocurre casi de la misma manera cuando de un lenguaje escrito intentamos una fallida traducción al lenguaje visual, en este caso particularmente, a la fotografía. Así, propongo una nueva interpretación de los versos orientales trasladados y reconfigurados al paisaje inmediato, al propio territorio. Así el ensayo, recorre una paleta cromática variada que va desde el gris otoñal pasando por los vívidos lilas y verdes de las estaciones cálidas hasta culminar con la frialdad del blanco-hielo que nos transporta y nos invade de vacío. La exaltación de los sentidos se hace presente en este poema visual.